Una pareja, con dos hijos de seis y ocho años, necesitó en agosto $20.868,93 para comprar los bienes y servicios que integran la Canasta Básica Total (CBT) y de esta manera no caer por debajo de la línea de la pobreza, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Ese mismo núcleo familiar requirió de $ 8.347,57 para adquirir la Canasta Básica Alimentaria, es decir, la cantidad mínima de comida para la subsistencia, y no caer por debajo de la línea de la indigencia.

La CBT, que reúne alimentos más indumentaria y transporte, aumentó durante agosto 3,6% en relación a julio, 25,1% en lo que va del año, y 36,9% en los últimos doce meses. En tanto, la CBA registró incrementos del 2,8%, 25,6% y 33,6% respectivamente.

A comienzos de mes, el presidente Mauricio Macri estimó que “con esta devaluación, la pobreza va a aumentar”, por lo que anunció un incremento en las partidas de la ayuda social.

Macri anunció un refuerzo en septiembre y diciembre para las casi cuatro millones de personas que reciben la Asignación Universal por Hijo y para los beneficiarios de otros programas sociales.

El INDEC también analizó que una familia de cinco miembros, constituida por una pareja y tres hijos, necesitó $21.949,53 para no ser pobre en el octavo mes del año.

El miércoles, el Gobierno porteño había dado a conocer sus cálculos del valor de las canastas e indicó que una familia tipo en la Ciudad de Buenos Aires debió contar en agosto con un ingreso mínimo de $20.937,90 para no ser categorizado como pobre.

La Ciudad había calculado que la CBT había registrado un ajuste de 3,5% en ese mes.